martes, 30 de septiembre de 2014

Situación de la epidemia de ébola

El ébola sigue avanzando de forma imparable en Liberia y Sierra Leona. El incremento exponencial en el número de casos apunta a que aún estamos en la fase inicial de la epidemia.

La previsión inicial de 20.000 casos realizada por expertos de la Organización Mundial de la Salud podría quedarse muy corta a la vista de los últimos datos. Las estimaciones más pesimistas sitúan la cifra probable de afectados en un millón doscientas mil personas, con más de seiscientos mil fallecimientos.

En el caso de Liberia la enfermedad afecta ya a 1 persona cada 1.183 habitantes. La epidemia ya está causando un daño irreparable a la ya de por sí maltrecha economía del país. Si la situación sigue deteriorándose podría llegar al escenario catastrófico de que Liberia fuera barrida del mapa por el virus.


La epidemia está muy activa en Liberia, Sierra Leona y Guinea. En los dos primeros casos la enfermedad está totalmente fuera de control. Nigeria y Senegal también presentan casos esporádicos de contagio, aunque todo apunta a que en estos países se ha logrado frenar el avance del virus.

Francia, España, Suiza, Gran Bretaña, Alemania y Estados Unidos han importado enfermos de ébola. La probabilidad de expansión del virus en estos países es prácticamente nula.

En agosto se produjeron trece fallecimientos en la República Democrática del Congo que podrían haber sido causados por un nuevo brote de ébola no relacionado con el brote anterior. Hasta el momento se han registrado 70 casos de este nuevo brote que han causado 42 fallecimientos.

lunes, 15 de septiembre de 2014

Simuladores de Negocio para la formación

En esencia, un simulador de negocio es un modelo matemático que reproduce, de forma aproximada, los resultados de una empresa en un sector de actividad concreto.

Los simuladores son herramientas extraordinarias para la formación, ya que permiten que los alumnos tomen decisiones de negocio de una empresa similar a la suya y que experimenten las consecuencias.



El primer simulador que utilicé en aula fue desarrollado para everis, hace ya ocho años, en un programa diseñado para que los empleados entendieran el modelo de negocio de la consultoría. Desde entonces he tenido la fortuna de poder crear un buen número de simuladores para empresas completamente diferentes: consultoría, telecomunicaciones, superficies comerciales, producción industrial, hoteles, estaciones de servicio y marketing digital. Incluso tuve la oportunidad de diseñar un simulador para la gestión privada de aeropuertos, el único que no llegó a utilizarse en aula por la paralización del proceso de privatización de AENA.

Estos simuladores se han utilizado en empresas y escuelas de negocio para toda clase de alumnos (estudiantes de posgrado, nuevos empleados, mandos intermedios y directivos) y en toda clase de programas (visión global de la empresa, cooperación, dirección del cambio, estrategia...).

En todos los casos el resultado es el mismo: los alumnos salen del aula con una percepción totalmente diferente de la empresa y el sector en el que trabajan basada en un conocimiento mucho más profundo de las consecuencias globales que derivan de las decisiones y actuaciones individuales. Un efecto secundario recurrente es que los alumnos comprenden mejor las decisiones tomadas por la dirección de la compañía, incluso en situaciones en las que ellos mismos fueron muy críticos con esas decisiones.

Los simuladores son la forma más eficaz que he encontrado de acercar a los empleados a la empresa en la que trabajan.


El éxito de los simuladores utilizados de esta forma es que empujan a los alumnos a pensar de una forma global, poniendo en duda sus ideas preconcebidas y ampliando de una forma drástica la visión de su empresa y el valor de su contribución personal a los resultados globales. Es la forma más eficaz de inducir cambios en la visión y el comportamiento de los empleados